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Enseñanzas espirituales
desde el corazón de Satsang
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La respuesta es indagar: “¿Quién soy yo?”.
Aham Sphurana
A Glimpse of Self Realisation
New Book about Sri Ramana Maharshi
Available Worldwide
On www.openskypress.com and Amazon:
“In my opinion, Aham Sphurana, a Glimpse of Self Realisation, will become a Treasure Trove of Wisdom to the Seekers of Truth in general, and particularly to the devotees of Bhagavan.”
Swami Hamsananda – Athithi Ashram, Tiruvannamalai
La respuesta es indagar: "¿Quién soy yo?".
Páginas 467-470
Un peculiar, aunque grotesco, personaje ha llegado al ashram vestido llamativamente con un traje de tres piezas, un sombrero de castor y un pañuelo anudado al cuello. Con este clima, su piel debería estar quemada; me pregunto cómo es que todavía parece intacta. Lleva un bastón de ébano con la miniatura de la cabeza de un león rugiendo hecho en bronce.
Atrae miradas curiosas por todas partes. Parece ser que el sarvadhikari [ashram manager-Ramana’s brother] se cayó del susto al ver al hombre y su bastón. Pensando que debe ser cortés con sus anfitriones, se quita el sombrero cada vez que se encuentra con alguien en el ashram, con el resultado de que la gente de aquí ha llegado a la conclusión de que han soltado un loco entre ellos. Como creen que les va a atacar, todos huyen de él en cuanto le ven.
Su cabeza es inusualmente grande y parece un gigantesco huevo de avestruz. El resto de su cuerpo está desnutrido y delgado. Está completamente calvo y tiene un bigotillo como un lápiz. Una cómica perilla añade el toque final a la excentricidad de su aspecto. Extrañamente, sus ojos protuberantes tienen un aspecto hilarantemente trágico: transmiten la impresión de un hombre que es incapaz de tomarse en serio a sí mismo, pero que siempre ha deseado hacerlo.
Entró en la sala y se inclinó ante Bhagavân, con el sombrero en la mano pegado a la barriga y el monóculo colgando en el aire. Bhagavân pareció observarle con apacible interés. Se presentó a sí mismo con Chadwick actuando como su intérprete. Su nombre es Monsieur Pierre Géant, pero sus amigos lo conocen como “L’affolé néant”(el pánico a la nada). Viene de la República del Gran Líbano, antes parte de Turquía; descendiente del lugar desde el fin de la Gran Guerra. Siempre le interesó el misticismo y la perspectiva de experimentar una unión personal con Dios Todopoderoso.
En 1896 había llegado a un punto de inflexión en su vida: había conocido a Swami Vivekananda en Inglaterra. Vivekananda le recomendó el estudio de la vida de su Gurú, así como del Vedanta. Así pues, el “Angustiado” se enfrascó en Sri Ramakrishna y en el Vedanta durante años. Las experiencias de Sri Ramakrishna le conmovieron hasta el alma y quiso reproducirlas para sí mismo. Justo cuando se sentía desesperadamente abatido y agitado por el hecho de que Ramakrishna ya no estaba en carne y hueso, un amigo de habla inglesa le leyó el libro de Paul Brunton y el “Maharishi” captó su interés profundamente. Así que se subió al primer barco de vaporque se dirigía hacia aquí. Tenía preguntas para Bhagavan.
P.: ¿Son tus enseñanzas las mismas que las de Sri Ramakrishna?
B.: Absolutamente.
P.: Si el Yo-soy-Dios es la Verdad, ¿no equivale a la arrogancia?
B.: No significa que tú -como te imaginas que eres- seas Dios. Significa que Dios es el verdadero “Yo”.
P.: Hay un ser que coexiste con la personalidad y se adhiere al cuerpo. Es conocido como la mente. Luego esta el Parabrahman [Supreme Being] mencionado en el Vedanta. Esto se conoce como la Esencia Impersonal del hombre. ¿Cuál es mi verdadero ser? ¿Puedo tener más de un ser?
B.: La mente es un fantasma. En la Esencia Impersonal la mente no se encuentra en ninguna parte.
P.: ¿Cómo se llega a ella?
B.: No hay nadie ahí para alcanzarla. Por lo tanto, no hay nada que obtener. Apágate y deja que la Luz brille. Apágate como mente y brilla como el Ser.
P.: En la práctica, ¿cuál es el método para ello?
B.: Investigar “¿Quién soy yo?”.
P.: Pero esta investigación también se hace solo con la mente.
B.: Comienza, sin duda, en la mente. Termina en la no-mente.
Bhagavân pidió a Chadwick que le leyera “¿Quién soy yo?” en francés. Así se hizo y la criatura escuchó con atención, ladeando su enorme cabeza contra un magro hombro, para que su oído izquierdo estuviera mejor expuesto a los sonidos que emanaban de los labios de Chadwick. En ese momento extrajo una pequeña trompeta de entre los pliegues de sus ropajes y se introdujo el auricular de la misma en la oreja izquierda.
La campana del artilugio la dirigió en dirección a Chadwick. Bhagavân miró las caras de sorpresa de la sala y se rió.
P.: ¿Cuál es la autoridad para decir que el mundo es un sueño? ¿Dónde está la prueba, quiero decir?
B.: ¿Existes durante el sueño?
P.: Sí.
B.:¿Existes ahora?
P.: Sí.
B.: Entonces, ¿cuál es la diferencia [in the two states]?
P.: No soy consciente de mi cuerpo ni del mundo[in sleep].
B. Ser inconsciente del cuerpo y del mundo se llama soñar. Permanece inconsciente de ellos ahora también. Eso verdaderamente es Jnana o Realidad. Este solo es el estado de auténtico despertar.
P.: Pero, ¿cómo podemos llamar a este mundo un sueño?
B.: ¿Por qué no?
P.: Hay mucha gente en la tierra. Si es un sueño, ¿de quién puede ser?
B.: Tuyo.
P.: Pero, ¿por qué elegirme a mí específicamente? Por ejemplo, puede ser incluso el sueño del amable señor Chadwick aquí presente.
B.: Solo tú estás ahí.
P.: ¿Y usted, señor?
B.: No, yo no estoy aquí ni allí. YO SOY. No hay ni aquí ni allí ni ninguna parte. YO SOY LO QUE SOY.
P.: No lo entiendo.
B.: Las señales producidas por los órganos sensoriales son de naturaleza meramente mental. Todo conocimiento de la diversidad es información mental ficticia. Tu Ser es Real. No hay nada más.
Q.:Quiero la prueba.
B.: Si se te da la prueba, ¿cómo podrás creerla?
P.: No lo entiendo.
B.: La prueba que se te dé, si es que la hay, será también una mera información mental.
P.: ¿Qué se puede creer, entonces, como verdadero?.
B.: Todo lo que se cree es falso. La verdad está en el Ser únicamente.
P.: ¿Cómo se alcanza este Ser?.
B.: Abandonando la idea de que podría haber algo que alcanzar y todas las demás ideas.
P.: ¿Cómo puedo hacerlo en la práctica?
B.: Investiga “¿Quién soy yo?”.
P.: ¿Será útil la repetición de sílabas sagradas? ¿Los mantras sagrados de tu religión no contienen algún tipo de poder espiritual latente? Desbloqueando este poder o energía ¿no podemos alcanzar el estado de Iluminación?
B.: Se te ha mostrado el método directo.
P.: ¿Son los otros caminos secundarios o desvíos?.
B.: Sí.
P.: ¿Debe seguir las restricciones alimentarias un buscador después de la Iluminación? ¿Puedo comer carne de cerdo?
B.: Intenta alimentarte de grano y frutas.
P.: ¿La investigación “¿Quién soy yo?” tiene que hacerse solo en tu presencia? Si la hago, por ejemplo, en Nantes ¿podría tener éxito en iluminarme? ¿Es necesaria tu presencia física? Quiero decir, ¿para que la práctica tenga éxito?
B.: Lo que importa es la mente. Si la mente se mantiene firme en la introversión ni siquiera surgen esas preguntas.
P.: ¿Está permitido adorar o incluso creer en un Dios personal?.
B.: Sí.
P.: ¿No se frustra el progreso hacia la Iluminación?
B.: Cuando estés lo suficientemente maduro, ni siquiera sentirás que eres tú el que está rezando.
P.: ¿Es la filantropía una distracción o debería uno intentar ayudar al mundo que sufre?
B.: Varía según el temperamento de la psique del individuo.
P.: Ya veo. ¿Y en mi caso?.
B.: Cuando ves el sufrimiento, ¿qué es lo primero que se te pasa por la cabeza?
P.: “Ojalá Dios hubiera creado un mundo en el que no hubiera sufrimiento”.
B.: Aquellos destinados a ayudar piensan – impulsivamente – “A ver qué puedo hacer aquí…”
P.: ¿Es necesario renunciar oficialmente a mi afiliación al Templo de La Rochelle?
B.: No.
P.: A veces me asusto cuando mi salud empeora. ¿Cómo puedo librarme de esos temores?
B.: Ya sabes que para este cuerpo perecedero hecho de elementos, la destrucción es segura un día. ¿Por qué lamentar lo inevitable?
.: Pero, ¿cómo puedo mantener el miedo a raya?
B.: No identificando el Ser con el cuerpo o la mente.
P.: ¿Pero cómo deshacerse de esa identificación errónea?
B.: Solo mediante la prosecución incesante de la investigación “¿Quién soy yo?”.
Editado por John David, Oct. 2021
Amor es
El fin de toda sabiduría
es amor, amor, amor.
- Ramana Maharshi
Aham Sphurana
A Glimpse of Self Realisation
New Book about Sri Ramana Maharshi
Available Worldwide
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“In my opinion, Aham Sphurana, a Glimpse of Self Realisation, will become a Treasure Trove of Wisdom to the Seekers of Truth in general, and particularly to the devotees of Bhagavan.”
Swami Hamsananda – Athithi Ashram, Tiruvannamalai
Amor es
23 de agosto de 1936
Esta mañana, cuando entré en la Sala, Sri Bhagavân me sonrió dulcemente como un niño y me entregó una carta diciéndome
‘ உனக்கு இது பிடிக்கும் , பாரேன் !. ’ [“¡Mira esto, te va a gustar!”]
Intrigado, la desdoblé y la leí. Era de un tal Mons. Alfred E. Sorensen, y decía [reproduced from memory] —
Oh! ¡Maestro de la montaña magnífica! Yo era antes como un sucio cerdo, consumiendo con ansia los excrementos de los órganos sensoriales. Llegué con una mente inquieta para escudriñar insolentemente tu autenticidad, pero en el momento en que tus ojos se posaron en mí, me quedé inmóvil como tú, pues aniquilaste gentilmente mi malévola facultad de afirmación-fabricación, que afirmaba arrogantemente “yo” y me sumergiste en mi propio estado interno intrínseco de Ser Absoluto, que en verdad solo eres Tú.
Beso el polvo de tus sagrados pies todos los días, pues al ahogarme de una vez por todas en el insondable océano de exaltación que eres en verdad Tú, has devorado mi mente traicionera para siempre. Ahora solo vivo como Amor a ti. Me he perdido felizmente en Ti, que eres el Amor mismo. Nunca más las miserias del mundo lograrán alcanzarme, pues solo veo en ellas tu adorada presencia.
Cuando tus ojos omniscientes se clavaron en los míos y dijeron “NO HAY NADA”, mi Corazón tiró desde dentro y, sabiendo que eras tú quien me llamaba, te seguí mansamente. Allí, me deshice en la NADA; ahora, NO soy. Ahora deambulo por el universo como un animal salvaje desenfrenado, sin saber qué hago ni por qué. Ahora todo lo que hay eres Tú, en donde no hay ningún yo.
Mi Maestro ha tenido la amabilidad de comunicarme, a través del señor Hurst, que me considera un Sahajajnâni o místico nato. Pero mi dicha está en saber que esta fea forma —que una vex consideré una conmigo mismo— ¡ha encontrado un lugar en la sagrada memoria de mi Maestro! Aunque ahora ya no hay duda de que nada existe aparte de mi Maestro, mi corazón ansía volver a posar los ojos en su cuerpo físico. ¡Que Sri Bhagavân haga que mi deseo se cumpla rápidamente! [Leave-taking:] El Amor de Bhagavan
G.: ¿Quién es este hombre?
B.: Vino aquí a principios de este año, quizás por invitación de Mr. Brunton
G.: Bhagavan le dirigió una mirada y alcanzó el Estado Final?!
B.: [twinkling] Bhagavan no causa nada. ¿Por qué piensas “¡Oh! Me siento en la Sala todos los días oyendo relatos de personas que obtienen experiencias espirituales elevadas y transformadoras de Bhagavân y escuchando ávidamente las enseñanzas de Bhagavân un día tras otro, —cuándo va a dar fruto todo esto y cuándo me convertiré en un Jnani? ¡¿El encanto de Jnana te está tentando demasiado?!” [laughs]
G.: Oh! no. En el momento en que vine aquí y Bhagavân me miró, me olvidé de mí mismo. Ahora solo pienso en Bhagavân, que ya es un jnani. Así que, ¿para quién voy a pedir Jnana?
B.: El secreto de Jnana es bhakti. El Amor incondicional,— sin motivo, incesante, pertinaz,— es la llave que abre la Puerta del Corazón de una vez para siempre. Ansía y anhélalo fervientemente no para que destruya tu ignorancia, sino simplemente porque ese Amor es posible [unto you]. Solo aquel que sabe amar con locura ha cumplido el propósito del nacimiento humano; no necesita nacer de nuevo. Aquellos que no saben amar vuelven repetidamente al inmundo océano del samsara para sufrir más y más.
G.: A todos los que vienen aquí Bhagavan les recomienda solo vichara.
B.: Vichara es un medio para eliminar la ignorancia que impide que el Amor resplandezca— porque la naturaleza del Ser es el Amor mismo. El amor no puede ser practicado como sadhana. Solo es posible rendirse a él. No se puede inculcar el Amor.
El Amor ya está ahí. Solo él ES. Todo lo que es necesario por tu parte es que abandones el pensamiento, que te hace imaginar que estás separado del Amor y, así, fundirte en Él. Entonces solo existe el Amor, que es una dicha más allá de la imaginación. Para quien ha descubierto la dicha extática del Amor sin intención, la práctica de sadhana es un absurdo irrisorio. Para aquellos que piden explicaciones, podemos decir que ese Amor florece solo en las almas que han perfeccionado sus sadhanas en nacimientos anteriores.
G.: Pero, de entre todas las sadhanas [prácticas] ¿vichara es la mejor?
B.: Sin ninguna duda.
Editado por John David, Oct. 2021
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